martes, 27 de septiembre de 2011

EN EL NEOLÍTICO...

El cavernícola hijo llega a la cueva y le da las notas al cavernícola padre, que las lee detenidamente.

Al rato el papá le dice:
        - Mira, que suspendas caza, lo comprendo, porque eres pequeño y todavía no puedes con la lanza.
        - Que suspendas agricultura te lo paso, porque es un rollo y al principio cuesta trabajo cogerle el truco.
        - Que suspendas pintura rupestre, te lo perdono porque todavía eres pequeño y no coordinas.

        Pero...QUE SUSPENDAS HISTORIA.......... ¡¡¡¡¡ SI NO LLEVAMOS NI DOS PÁGINAS !!!!!

miércoles, 21 de septiembre de 2011

ORTOGRAFÍA: REGLAS GENERALES DE ACENTUACIÓN

PRACTICA LA ORTOGRAFÍA





ASUNCIÓN

BUENAS NOCHES, BUENAS NOCHES

ESTE ES EL TRABAJO QUE HA LLEGADO SIN FALTAS DE ORTOGRAFÍA Y BIEN PRESENTADO. ENHORABUENA A LA AUTORA.

 
 BUENAS NOCHES,
              BUENAS NOCHES

Había una vez un niño llamado Óscar. Ya era de noche y estaban cenando como todas las noches, pero Óscar no sabía que esa noche iba a ser una noche especial. Después de cenar Óscar como siempre ve un rato su programa favorito: El Hormiguero. Después de ver su programa favorito, se fue a dormir y le dio un beso a cada uno de sus padres y dijo:
- Buenas noches, buenas noches.
Y ellos contestaron lo mismo. Luego su madre le preguntó:
- Óscar, ¿has hecho las tareas que te ha mandado la maestra?
- Buenas noches, buenas noches- contestó él.
- ¡Ni buenas noches ni nada, has hecho las tareas sí o no!
- Buenas noches, buenas noches- contestó él como si no pudiera decir nada más que “Buenas noches, buenas noches”.
Después de tanta discusión a Óscar se le ocurrió una idea: escribir lo que quería decir. Entonces cogió una hoja y un lápiz y escribió:
Mamá, sí he hecho las tareas, pero no sé por qué no puedo decir nada más que “Buenas noches, buenas noches “
Entonces le dio el papel a su madre y nada mas leerlo ya sabía lo que le pasaba. La madre le dijo a Óscar:
- ¡Mañana vamos a ir a hacer un crucero por todo el mundo!
Y él, de la emoción, dijo:
-  ¡Anda ya!
- ¡Te se ha curado!- dijo la madre.
- Sí, pero ¿vamos o no al crucero?
- No, lo siento hijo, estamos en crisis. Pero lo importante es que de la emoción que tenías se te ha quitado esa enfermedad tan rara.


 Paula Martínez Baena, 20 – 9 – 2011           FIN